Ir al contenido principal

Entradas

Mostrando entradas de noviembre, 2022

UNA PALABRA PARA VIVIR

Porque la apariencia de este mundo se pasa. Quisiera, pues, que estuvieseis sin congoja.  1 Corintios 7:31b-32a En 1 Corintios 7, Pablo está hablando, en la superficie, de casarse, volverse a casar, casarse donde solo hay un creyente y sus hijos. Digo en la superficie porque lo que realmente nos está diciendo es que no importa lo que esté pasando en su vida, una relación con Dios Padre, Dios Espíritu Santo y Dios Hijo (Jesús) debe seguir siendo su prioridad número uno. Permítame prologar lo que voy a decir con dos cosas. En primer lugar, no quiero que esto se malinterprete como una declaración política; no es. Es lo que yo creo desde un punto de vista bíblico. Si elige hacerlo político, eso depende de usted. En segundo lugar,  creo en la conservación en todas sus formas: en nuestros recursos naturales, en el control de la contaminación provocada por el hombre y en el reciclaje. No cabe duda de que los humanos somos en parte responsables de la extinción de ciertas especies de a...

El Pueblo Escogido de Dios

 El Pueblo Escogido de Dios Vestíos, pues, como escogidos de Dios, santos y amados, de entrañable misericordia, de benignidad, de humildad, de mansedumbre, de paciencia; soportándoos unos a otros, y perdonándoos unos a otros si alguno tuviere queja contra otro. (Colosenses 3:12-13). El amor “no se goza de la injusticia, mas se goza de la verdad”.  La persona cuyo corazón está inundado de amor se entristece a causa de los errores y de las debilidades de los demás; pero cuando triunfa la verdad, cuando se disipa la nube que ensombrecía el buen nombre de otro, o cuando se confiesan los pecados y se corrigen las equivocaciones, se regocija. El amor no solamente soporta las faltas de los demás, sino que se somete alegremente a cualquier sufrimiento o inconveniente que tal condescendencia pudiera hacer necesario. Tal amor “nunca deja de ser”. Jamás puede perder su valor; es el atributo del cielo. Su poseedor lo introducirá como un precioso tesoro a través de los portales de la ciuda...

La oración secreta y el estudio de la Biblia

La Oración Secreta y el Estudio de la Biblia La oración eficaz del justo puede mucho.  (Santiago 5:16). La iglesia de Dios está compuesta por vasos grandes y pequeños.  El no espera que los vasos más pequeños tengan la misma capacidad de los grandes. Espera dividendos de acuerdo con lo que cada persona tiene, no de acuerdo con lo que no tiene.  Haga lo mejor que usted pueda, y Dios aceptará sus esfuerzos. Lleve a cabo el deber que le queda más cerca y cúmplalo con fidelidad, y su trabajo será totalmente aceptable al Maestro.  En su deseo de realizar algo grande, no pase por alto las tareas más pequeñas que le esperan. Guárdese de no descuidar la oración secreta ni el estudio de la Palabra de Dios. Estas son las armas que debe emplear en contra de aquel que lucha por impedir su progreso hacia el cielo.  El primer descuido de la oración y del estudio de la Biblia hace que el segundo sea más fácil.  La primera oposición a la súplica del Espíritu prepara el cam...

Fiesta de Todos los Santos

Primera lectura Lectura del libro del Apocalipsis 7, 2-4. 9-14 Yo, Juan, vi a otro ángel que subía del oriente llevando el sello del Dios vivo. Gritó con voz potente a los cuatro ángeles encargados de dañar a la tierra y al mar diciéndoles: «No dañéis a la tierra ni al mar ni a los árboles hasta que sellemos en la frente a los siervos de nuestro Dios». Oí también el número de los sellados, ciento cuarenta y cuatro mil, de todas las tribus de Israel. Después de esto vi una muchedumbre inmensa, que nadie podría contar, de todas las naciones, razas, pueblos y lenguas, de pie delante del trono y delante del Cordero, vestidos con vestiduras blancas y con palmas en sus manos. Y gritan con voz potente: «¡La victoria es de nuestro Dios, que está sentado en el trono, y del Cordero!». Y todos los ángeles que estaban de pie alrededor del trono y de los ancianos y de los cuatro vivientes cayeron rostro a tierra ante el trono, y adoraron a Dios, diciendo: «Amén. La alabanza y la gloria y la sabidur...