Señor nuestro Jesucristo, que en este admirable sacramento nos dejaste el memorial de tu pasión, concédenos venerar de tal modo los sagrados misterios de tu Cuerpo y de tu Sangre, que experimentemos continuamente en nosotros el fruto de tu redención. Tú que vives y reinas con el Padre en la unidad del Espíritu Santo y eres Dios por los siglos de los siglos. PRIMERA LECTURA [Melquisedec presentó pan y vino.] Del libro del Génesis 14, 18-20 En aquellos días, Melquisedec, rey de Salem, presentó pan y vino, pues era sacerdote del Dios altísimo, y bendijo a Abram, diciendo: “Bendito sea Abram de parte del Dios altísimo, creador de cielos y tierra; y bendito sea el Dios altísimo, que entregó a tus enemigos en tus manos”. Y Abram le dio el diezmo de todo lo que había rescatado. Palabra de Dios. Te alabamos Señor SALMO RESPONSORIAL del salmo 109 R. Tú eres sacerdote para siempre. Esto ha dicho el Señor a mi Señor: “Siéntate a mi derecha; yo haré de tus contrarios el estrado donde pongas l...
Actividades de la Iglesia Parroquial de San Pedro Apóstol de Cártama