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Dios, amor inagotable

Dios, fuente de amor inagotable, manantial de bienestar. Tú me das el milagro de un nuevo dia, la oportunidad de vivir plenamente conforme a tus enseñanzas, de compartir con seres maravillosos. 

Quiero darte gracias por la paz que pones cada dia en mi corazón, por tener paciencia, perseverancia y fe para enfrentar con éxito los momentos dificiles; deseo permanecer a tu lado, darte gracias por el pan de cada día, por cuidar de mi y de mis seres queridos, por mantenernos unidos en el amor. Ayúdame a sanar las heridas que por mí pobreza espiritual sufren quienes he lastimado, dame lo necesario para sentir y corregir mis pensamientos y conductas, y así encaminar mis pasos a ese lugar que has reservado para mí. Déjame servite y dar siempre lo mejor de mí a donde vaya. Guárdame del peligro y concédeme estar atento a tu voz. Gracias Dios. Por Jesucristo tu Hijo nuestro Señor.
Amén.
DIOS TE BENDIGA.

Dios Padre de amor y bondad, cuando el calor mañanero me invita a levantarme en medio de la grandeza de tu ser, y abres mis ojos y mi alma para sentir la frescura de tu amor, fuente de la creación y del milagro de la vida, bendito seas por siempre mi Dios.
Señor, enriquece mi corazón, guárdalos del dolor, de todo mal y llénalo con tu gloria. Dios, que mis manos se abran para recibir cuanto tienes reservado para mí, que mis pies vayan guiados por Ti al lugar en donde quieres que esté. Que tus brazos protectores me reciban cuando quiera descansar de mi cruz, dale calma a mi vida y esperanza a mis sueños, que el afán de cada día sea grandioso a tus ojos, que tu misericordia infinita me alcance cada instante de mi vida. Que mis seres queridos estén guardados bajo tu amparo y tu amor los guíe. Que tu paz sea mi cimiento y tu Palabra mi escudo. Que tus ángeles nos protejan y tu Hijo Jesucristo sea nuestro guía por los siglos de los siglos.
Gracias Dios.
Amén.
DIOS TE BENDIGA.

Entre el dolor y Jesús.

Esta vez, Marta enfrentaba un momento difícil y terrible en su vida. Paz sería la última palabra que existiría en su triste y angustiado corazón. Es probable que estuviera entre llantos, atendiendo a los tantos que fueron a visitarles a ella y a su hermana para darle el pésame. Su amado hermano y amigo de Jesús, Lázaro, había muerto.

¿Por qué Jesús no llegó a tiempo? ¿Por qué no llegó cuando Marta y María le habían mandado a llamar? Su corazón no tan solo estaba quebrantado, también estaba desilusionado por Jesús. Habían pasado unos días de la muerte de Lázaro y Jesús no se había acercado a su hogar. Que momento tan confuso para estas mujeres. Las que le habían visto sanar a otros. ¿De cuántos milagros habrían sido testigos? Y hoy lloraban la muerte de su apreciado hermano.

Le dijeron a Marta que Jesús (luego de cuatro largos días de la muerte de Lázaro) se acercaba a su casa en Betania, ella corriendo fue a su encuentro y sin dudarlo le hizo un claro reclamo: “Señor, si tan solo hubieras estado aquí, mi hermano no habría muerto.” (Juan 11:21b NTV). Una vez más Marta sabía que en Jesús encontraría respuesta a su confuso corazón; guardando esperanza de que algo podía calmar su dolor. A su pedido añadió: “pero aun ahora, yo sé que Dios te dará todo lo que pidas.” (Juan 11:22 NTV). Marta suena diferente, esta vez, habla con fe. En ella no existían dudas de que el Maestro podía cambiar sus circunstancias. Jesús podría transformar el peor momento de su vida con tan solo pedir a Dios. Con su sola palabra, Marta encontraría verdadera paz.

La hermana de Lázaro tuvo fe, pero ¿habrá alcanzado la paz que sobrepasa entendimiento? ¿Podría tener paz de que Jesús estaba en control de todas las cosas? Sin duda Marta estaba aprendiendo una gran lección. Esta mujer valiente y atenta, llena de pasión por Dios conocería una profunda verdad que cambiaría su vida y la nuestra para siempre.

Estoy segura que el amor del Padre Celestial (quién nos ama con locura) no pasó por alto este encuentro para contestar sus preguntas y revelar su Poder. Jesús declaró en la vida de Marta su verdadera identidad. Él es el hijo de Dios, Emmanuel con nosotros y Príncipe de Paz. Juntas seremos testigos del sello del evangelio en Jesús, la resurrección.

¿Sientes paz de que Jesús está en control de todo?
Entonces Jesús les dijo claramente: Lázaro ha muerto; y me alegro por vosotros, de no haber estado allí, para que creáis; mas vamos a él. Dijo entonces Tomás, llamado Dídimo, a sus condiscípulos: Vamos también nosotros, para que muramos con él. Vino, pues, Jesús, y halló que hacía ya cuatro días que Lázaro estaba en el sepulcro. Betania estaba cerca de Jerusalén, como a quince estadios; y muchos de los judíos habían venido a Marta y a María, para consolarlas por su hermano. Entonces Marta, cuando oyó que Jesús venía, salió a encontrarle; pero María se quedó en casa. Y Marta dijo a Jesús: Señor, si hubieses estado aquí, mi hermano no habría muerto. Mas también sé ahora que todo lo que pidas a Dios, Dios te lo dará.

S. Juan 11:14‭-‬22
No se turbe vuestro corazón; creéis en Dios, creed también en mí.

S. Juan 14:1

La paz os dejo, mi paz os doy; yo no os la doy como el mundo la da. No se turbe vuestro corazón, ni tenga miedo.

S. Juan 14:27

••°🌸🌿°Versículo a tener en cuenta ☀️
''No temas, porque yo estoy contigo; no desmayes, porque yo soy tu Dios que te esfuerzo; siempre te ayudaré, siempre te sustentaré con la diestra de mi justicia.'' Isaías 41:10

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